Portafolio de Productos Financieros: ¿Por qué es importante y cómo ampliarlo?
May 08, 2024Invertir es propiciar que los recursos con los que contamos tengan un buen rendimiento en el futuro. Eso no se logra a la antigua, guardando el dinero debajo del colchón. En la actualidad, un portafolio de productos financieros es una opción inteligente para tener la oportunidad de que nuestras finanzas crezcan.
Los portafolios están cimentados, principalmente, en la teoría del Premio Nobel de Economía Harry Max Markowitz. Se trata de un modelo matemático con el que los inversionistas optimizan el riesgo para obtener una tasa de rendimiento más favorable.
Permite colocar el dinero en diferentes tipos de inversión y estructurar una estrategia financiera para alcanzar un objetivo: hacer que el dinero gane valor.
Antes de empezar a crear tu portafolio de productos financieros es preciso que te hagas la pregunta: ¿para qué lo quiero? Y con la respuesta es momento de empezar tu recorrido hacia una cartera de activos con la que puedas sacar provecho de tu dinero.
¿Te interesa? Sigue leyendo, aquí te explicamos la importancia de un portafolio de productos financieros, cómo crearlo y optimizarlo.
¿Qué es un portafolio de productos financieros?
Se trata de una cantidad de activos financieros con la cual diversificas una inversión con la finalidad de optimizar la gestión del riesgo y obtener expectativas de rentabilidad de varias fuentes.
Las inversiones se hacen en acciones, bonos, divisas, materia prima, acciones, depósitos a plazos, entre otros productos.
Generalmente, se invierte en varios activos tanto de renta fija como variable, buscando un equilibrio que permita reducir el riesgo, administrar el dinero e impulsar el crecimiento del capital. En este sentido es muy importante contar con un asesor para que el riesgo se puede manejar mejor.
Existen varios tipos de portafolios de productos financieros. A continuación detallaremos cada uno de ellos clasificados de acuerdo a su cartera de inversión:
Cartera de crecimiento
Como su nombre lo indica, se trata de una cartera que tiene como objetivo impulsar el crecimiento del capital. Para ello es necesario asumir algunos riesgos como, por ejemplo, invertir en empresas que están en proceso de desarrollo.
El riesgo de inversión es alto, pero las recompensas también pueden serlo. Sin embargo, hay aspectos que se toman en cuenta para tratar de reducirlo, como, por ejemplo, crecimiento escalable, márgenes sostenibles, entre otros.
Cartera de ingresos
Es un instrumento financiero que se centra en inversiones que proporcionen ingresos regulares. Se invierte en activos de tal manera que tus ahorros trabajen para ti.
Cartera de valor
Se basa en la compra de activos a un mínimo costo, especialmente aquellos que están por debajo del valor del mercado y que tienen un potencial de crecimiento dentro de un portafolio de productos financieros.
Un ejemplo de ello serían los activos de una empresa con problemas financieros y que puede salir a flote con una mínima inversión de capital.
¿Por qué necesito un portafolio de inversiones?
Tener tu dinero en una cuenta de ahorros es una apuesta segura de que siempre tendrás a mano tu capital y de que en un lapso de tiempo habrás ganado un poco en intereses.
Sin embargo, la economía se mueve de manera acelerada y hacer que el dinero vaya al menos a ese mismo ritmo es parte de una inteligente planeación financiera, sobre todo si te encuentras en un país donde la moneda se devalúa con facilidad.
Con un portafolio se protege el capital y al mismo tiempo se pueden obtener ganancias importantes que permiten planeación a futuro como, por ejemplo, un fondo de jubilación, viajes al extranjero, estudios universitarios.
Colocar el dinero en una cartera financiera proporciona oportunidad de liquidez procedente de diversas fuentes.
A diferencia de otros tipos de inversión, un portafolio te permite tener el dinero en el momento que lo requieras, además puedes usar solo una parte y el resto mantenerlo en activos.
Invertir en un portafolio optimizado puede significar mayores posibilidades de estabilidad económica tanto para el presente como para generaciones futuras.
Existe la falsa creencia de que este instrumento financiero está destinado solo para quienes poseen un patrimonio económico elevado. La realidad es que en la actualidad, con la asesoría correcta y el uso de herramientas digitales flexibles, millones de personas sin ingresos elevados pueden tener una cartera productiva.
¿Cómo crear un portafolio?
Si estás decidido a crear una cartera de inversiones, tienes que saber que tu principal objetivo es que esta sea sólida, que se ajuste a tus necesidades y a la capacidad económica que posees.
No se trata de empezar a comprar activos esperando una rentabilidad y ya. Es preciso seguir una serie de pasos que te colocarán en el camino correcto.
Estos son los pasos a seguir para crear una cartera de forma ordenada y planificada:
Perfil del inversor
Lo primero a tomar en cuenta al construir un perfil como inversionista es el riesgo que se está dispuesto a tomar, porque basados en esto se define la cantidad de dinero a invertir, el tipo de mercados y otras variables.
Los expertos establecen tres perfiles diferentes:
- Conservador: El perfil de riesgo es bajo, está dispuesto a esperar un largo periodo para el retorno de su dinero. Este inversionista coloca su capital en modelos seguros y ya probados.
- Moderado: Colocan un poco de riesgo en mercados no tan establecidos y con un nivel de exposición media. Buscan rentabilidad a mediano plazo.
- Agresivo: Se trata de inversionistas que apuestan por los denominados startups o empresas emergentes. Aquí figuran, también, las criptomonedas, el trading en la bolsa, entre otros productos financieros.
¿Ya sabes en cuál de estos tres tipos de inversores te encuentras? Te lo preguntamos porque es indispensable que antes de empezar a construir un portafolio tengas claro cómo quieres invertir el dinero.
Establecer el objetivo
¿La rentabilidad se espera obtener a corto, mediano o largo plazo? Porque dependiendo de ello y del perfil del inversor se puede determinar cuáles serán los activos en el que se colocará el capital.
Hay que establecer cuál es el objetivo porcentual de la rentabilidad, los beneficios que se quieren recibir y cuál será el plazo de inversión.
Fijar los instrumentos financieros
Como ya te mencionamos anteriormente, un portafolio de productos financieros debe tener un equilibrio. Se logra con una buena combinación de activos. Lo ideal es contar con una variedad entre los más arriesgados y los más conservadores.
También se recomienda incursionar en varios sectores, todo depende del nivel de riesgo que estés dispuesto a asumir y el capital con el que cuentas.
Medir la rentabilidad de los activos
Una vez que ya sabes cuál es tu perfil de inversor y defines los instrumentos financieros en los que deseas tener participación, es el momento de medir la rentabilidad de esos activos elegidos, ¿cómo hacerlo?
Cuando los activos se adquieren hay que medirlos de manera constante y verificar la renta obtenida con los meses.
Si te decidiste por una inversión de valor, lo ideal es llevar un registro de los precios del mercado.
Medir la rentabilidad del portafolio
Los números que arrojen la medición constante permitirá determinar qué tan rentable es el portafolios que armaste. Toma en cuenta que cuando tienes una cartera muy amplia es normal que algunos activos tengan mejor rendimiento que otros.
La idea en este paso es que evalúes no el rendimiento individual, sino el general.
Con este resultado es momento de determinar si tu portafolios genera pérdidas o ganancias, entonces podrás determinar qué activos vale la pena mantener y cuáles son mejor dejar de lado.
Por último, recuerda que contar con cartera efectiva requiere de educación financiera, tiempo y paciencia. Si estableces tus objetivos desde el principio y tienes un plan de inversión, hay que monitorearlo constantemente y hacer los cambios que sean necesarios en el momento oportuno.
Principales productos financieros
Para armar un portafolio sólido no hace falta invertir en todos los productos financieros, pero sí tener a disposición una variedad de ellos para trabajar con base a los tiempos de inversión y la liquidez disponible.
La economía se mueve de forma constante, evoluciona, se adapta a los tiempos. Si los inversionistas entienden estos movimientos, pueden administrar mejor su capital para, en lugar de mantenerlo estático, hacer que generen ganancias.
Lo primero que debes saber es que existen dos tipos de activos: los de renta variable, que son aquellos en los que no hay seguridad del retorno del capital (aunque generalmente tienen mejores proyecciones), y los de renta fija, que le prometen al inversor el retorno del dinero (mediante intereses bajos, generalmente).
Entre los de renta variable se encuentran, por ejemplo, las acciones, y en los de renta fija bonos, letras, entre otros.
En la actualidad, estos son algunos de los productos financieros que vale la pena tomar en cuenta al momento de armar una cartera:
1. Divisas sólidas
Es uno de los productos financieros más utilizados y que definitivamente podría formar parte de un portafolio de productos financieros optimizado.
El dólar estadounidense es la moneda dominante, le sigue el euro, el yen japonés y la libra esterlina. Es importante no perder de vista las divisas de mercados emergentes que son aquellas de curso legal de países en vías de desarrollo, como el rand sudafricano.
Los traders muestran interés en este tipo de monedas, ya que generalmente experimentan una alta volatilidad. En todo caso, desde este punto de vista, puede generar importantes ganancias.
Sin embargo, la decisión más inteligente es invertir en divisas sólidas como el dólar porque:
- Proteges tu patrimonio ante la devaluación de la moneda local;
- Tienes más fácil acceso a mercados internacionales;
- Diversificas el riesgo de inversión;
- Es un mercado de gran tamaño y, por lo tanto, con una alta liquidez;
- Los costos de operatividad son muy bajos;
- Se trata de un mercado transparente donde no se pueden manipular los precios.
El mercado de divisas es el más grande del mundo, funciona mediante la fluctuación de la moneda y además cubre el flujo monetario del comercio internacional.
2. Fondos de inversión
Consiste en la participación de varios inversores que colocan el dinero en manos de un profesional que se encarga de moverlo en la bolsa de valores para que este produzca un rendimiento.
Este tipo de fondos permite participar en una gran inversión, porque todos colocan su capital con un único objetivo.
Lo interesante de este modelo es que cualquier persona que tenga un mínimo de dinero ahorrado se puede incorporar para participar en grandes negocios. La idea es que el dinero ahorrado crezca por encima de los índices de inflación.
3. ETFs
Se trata de un fondo de inversión que cotiza en la bolsa de valores y se puede comprar y vender de una forma sencilla como si se tratará de acciones individuales.
dReplica el comportamiento de índice bursátil, las materias primas, los tipos de cambio o la combinación de varios activos subyacentes. Al ser tan amplios la inversión es más diversificada.
Existen varios tipos de ETFs divididos en dos formatos diferentes: los que replican un índice y los que hacen referencia a un sector.
Te interesará saber que cualquier persona puede invertir en ETFs, solo necesitas a una plataforma que ofrezca este tipo de productos.
4. Acciones
Consiste en colocar el dinero en una empresa, lo que hace que automáticamente te conviertas en socio de esta. Con ello también obtienes derechos y obligaciones.
Este es un modelo de renta variable, ya que no se realizan acuerdos para devolver el capital invertido. Las ganancias dependen de la rentabilidad de la empresa, siendo esta una de las principales ventajas.
Lo interesante de comprar acciones es que con una mínima cantidad se puede tener acceso a grandes sociedades económicas.
5. Bonos
Los bonos son inversiones que se entregan a la empresa privada o al gobierno para realizar una inversión y este asume el compromiso de devolver el capital más un porcentaje extra en un tiempo determinado.
En otras palabras, el inversor adquiere la deuda de una empresa pública o privada. El dinero obtenido se usa para continuar con las operaciones y promover el desarrollo de la misma.
Se trata de un modelo de renta fija en el cual el inversor conoce desde el primer momento el volumen de la ganancia.
Cuando se adquieren bonos se debe determinar el monto de la inversión, la fecha para la devolución del capital y de los intereses, el tipo de moneda en que se realizará la transacción y la modalidad del pago.
Desde este punto de vista, los bonos tienen un riesgo menor que las acciones. Sin embargo, también tienen factores que deben tomarse en cuenta como, por ejemplo, el índice inflacionario, las tasas anuales que se recibirán, la credibilidad de quien emite el bono, entre otros.
Importancia de diversificar el portafolio
La razón principal por la que un portafolio debe ser diverso es que de esta manera se disminuye el riesgo de exponer el patrimonio. El objetivo siempre será que los activos tengan un buen rendimiento.
Para tener un portafolio de productos financieros diverso deben tomarse en cuenta los siguientes factores:
- Conocer las características de los activos, porque de esa manera se puede establecer cómo será su rendimiento y determinar cuál es el nivel de riesgo.
- Se puede definir un sector económico para invertir, pero los expertos recomiendan diversificar para abarcar varias industrias y así disminuir el impacto de las fluctuaciones en el mercado.
- Determinar cuáles son los activos que ofrecen mayor diversificación y menor riesgo, como, por ejemplo, las divisas sólidas y bonos.
Por regla, mientras más tipos de activos conformen un portafolio, las posibilidades de diversificar las fuentes de rendimiento pueden ser mayores
A esto se le suma que el riesgo se puede manejar mejor. Supongamos que colocas todo tu patrimonio en un solo activo y este experimenta una caída. El resultado sería una descapitalización.
Sin embargo, si el capital está distribuido en diferentes activos, la caída de uno no sería significativo porque lo compensa el alza en otro.
¿Cómo diversificarlo?
El principio básico para la diversificación de una cartera es no concentrar todo el capital en una sola clase de activos. Es importante colocar el capital en varios mercados que generen un equilibrio entre ganancias y pérdidas.
Cuando haces esto, el riesgo es menor tanto a corto como a largo plazo. Si quieres diversificar tu portafolios estos son los aspectos que debes tomar en cuenta:
Encuentra un equilibrio entre riesgo y rendimiento
En este punto es importante que tengas definido tu perfil como inversionista, porque basado en ello puedes determinar cuál es el riesgo que estás dispuesto a correr a largo plazo.
Con estos datos puedes escoger los activos que proporcionen equilibrio entre el riesgo que estás dispuesto a correr y las ganancias que esperas obtener.
Pon atención a las economías en crecimiento
Las economías con un porcentaje de demanda alta son una buena oportunidad de inversión, porque cuando una demanda es sostenida con el tiempo los precios se elevan.
Así que si compras activos en pleno proceso de crecimiento, lo harás a costos bajos y a mediano plazo ese precio será más alto generando una ganancia.
Cuidado con la especulación
Es posible que en el camino te encuentres con oportunidades de inversión que son difíciles de creer, son las que se conocen como "milagros" o "especulación", por ser demasiado buenas para ser verdad.
Antes de tomar la decisión de invertir en ellas es importante analizar bien el mercado y evitar colocar todo el dinero en este tipo de activos.
Aun cuando te "prometan" o "garanticen" el retorno del capital con altos intereses, considera que todas las inversiones tienen un nivel de riesgo.
Cuando diversifiques tu cartera si te insisten en un gran rendimiento a corto plazo, lo más probable es que te estén engañando.
¿Cómo disminuir el riesgo de un portafolio?
Cuando armamos un portafolio debemos usar todas las herramientas que estén a nuestro alcance para disminuir el riesgo. Estos son los aspectos que debemos tomar en cuenta:
- Que sea diversificado para amortiguar los movimientos de algunos activos que podrían estar en la baja en un determinado momento.
- Considerando el perfil del inversor debe realizarse un monitoreo constante para optimizarlo en el momento que se requiera.
- Disminuir los activos que estén dentro del grupo de renta variable.
- Evaluar los instrumentos de inversión, lo ideal es hacerlo cada seis meses.
- Solicitar asesoría de los expertos en el tema.
- Que tu fondo de emergencia no sea mayor al 20%.
Algo que debes saber es que los portafolios son susceptibles a la volatilidad del mercado, toda vez que muchos de los activos están correlacionados. Entonces, en este punto volvemos a insistir en la necesidad de contar con una cartera diversa.
Mientras menor sea la relación de los activos menor es la volatilidad del portafolio y, por lo tanto, se disminuye el riesgo.
Algunos consejos finales
Como puedes darte cuenta un portafolio de productos financieros es una herramienta que puede ayudarte a optimizar tu patrimonio. Para ello es necesario contar con la asesoría correcta.
Cuando se tiene una cartera de inversión es muy importante evitar vender acciones en un corto de periodo de tiempo, la razón es que la mayoría de los activos toman un largo periodo para dar los frutos esperados.
También es un error gastar demasiado dinero en un activo, mientras menor sea el precio y mayor el tiempo esperado, más alta será la ganancia.
Por último te reiteramos que la diversificación es la base fundamental de un portafolio de productos, porque cuando unas están en declive otras amortiguan el impacto.
Para seguir la ecuación de asesoría + diversificación, puedes fundamentar tu portafolio de productos financieros en una plataforma de gestión patrimonial.
Este recurso digital sirve como intermediario para inversiones internacionales - como acciones de empresas estadounidenses, por ejemplo - y proporciona a los usuarios insights de expertos que analizan los mercados de manera continua.
¿Te fue de utilidad esta información? En nuestro blog encontrarás más post interesantes que te ayudarán en tu planeación financiera, así que, ¡quédate con nosotros!